Cap.2-Las miradas.

Me levante a primera hora de la mañana.
Me dirigía hacia el baño cuando Yaiza salio de su cuarto.
-¡Hola,Bella!¿Has dormido bien?-me pregunto un poco grogui.
-Hola.Si,gracias.La cama era muy cómoda.
-¿Ibas al baño?
-Mm,si,pero entra tu primero.-le dije.No quería llegar tarde al instituto pero ella vivía allí y yo solo me iba a quedar unos meses.
-Oh,no.Yo desayuno antes de ducharme.
Asentí y me fui directa al baño mientras ella bajaba las escaleras para ir a la cocina.
Me vestí con una sencilla blusa de color azul marino y unos vaqueros desgastados.No encontraba mis botas de agua,así que cogí mis botas de montaña.
Me cepille el pelo y me hice una coleta a un lado,me puse un gorro y baje para desayunar.
Solo estábamos Yaiza y yo.
-Te he preparado un bol con leche y cereales integrales.¿Te gustan?
-Si,me encantan.Gracias.
Cuando Yaiza se cambio fuimos en dirección a un Mercedes plateado.
-Bonito auto.-le dije,suponiendo que era suyo.
-¿Si,verdad?Pero no es mio...Es tuyo.-me dijo sonriendo.
-¿Que?-le pregunte.¿Charlie me lo había comprado?Tendría que darles las gracias.
-Si,papa te lo compro por que sabia que no tenias.Ese es el mio.
Era un Audi negro.
-Es muy bonito.-le dije.No entendía mucho de coches.
Fuimos en el coche de ella ya que yo no sabia como llegar al instituto.
Cuando salimos del auto todo el mundo nos miraba.
Empezamos a caminar pero ,como no,me tropecé y se me callo la mochila.
Cuando la fui a recoger había alguien allí,un chico que se agacho y la recogió por mi.
-Gracias.-le dije casi sin aliento.Era muy guapo y musculoso.
Tenia el pelo castaño dorado y despeinado.Era pálido y tenia los ojos verdes.
Llevaba una blusa casi del mismo color que la mía y unos vaqueros pitillos de unos tonos mas oscuros que los mios.
-No hay por que darlas.-me dijo sonriendo.
Le devolví la sonrisa con gran rapidez.
-Hola,Edward.Ella es Bella,mi hermanastra.
-Hola,Yaiza.Es un gran placer,Bella.Soy Edward Cullen.¿Cual es tu primera clase?-me pregunto sin dejar de sonreirme y de mirarme a los ojos.
-Español-le dije sonriendo de oreja a oreja y mirando sus ojos del color de las esmeraldas.
-Te acompaño.También es la mia.Adios,Yaiza.-se despidió mientras me tendía la mano.
-Adiós-le dije a Yaiza mientras tomaba la mano de Edward sin dejar de mirarlo.
-Adiós.-escuche decir a Yaiza.
Cuando llegamos a clace me abrió la puerta para que pasara yo primero,como todo un caballero.
El ya tenia aciento con un chico forzudo.
El profesor me mando a un asiento justo detrás de el.
Nos pasamos la clase mirándonos y sonriendonos mutuamente.
En una ocasión me mando un papel en donde había escrito con una letra muy elegante: